Esta denominación se daba a los vagones cerrados, con rodadura de ejes, que permitian transportar mercancia de alto valor de forma protegida de la intemperie, asi como de hurtos o vandalismo.
Todas las compañías ferroviarias dispusieron de este tipo de vagones en mayor o menor medida, dependiendo del tipo de negocio de la empresa.
Así pues, una empresa que se dedicaba principalmente al transporte de minerales, tendría muchos vagones de tipo tolva o abiertos para el transporte de esta mercancía, y pocos o muy pocos de tipo cerrado, usados exclusivamente para el traslado de herramientas, explosivos, o algun elemento de alto valor.
Una compañía generalista, dispondría de un buen parque de estos vagones, ya que, como se ha indicado se utilizaba para el transporte de mercancia protegida de la intemperie (abonos, grano ensacado, fruta, pescado, paquetería, muebles, etc...), si bien tambien fueron usados para el transporte de ganado mayor, tales como caballos, terneros o mulas.
Muchos de ellos fueron tambien transformados para otro tipo de servicio, tales como furgón de jefe de tren, taller móvil, o incluso albergando un calderín de vapor para dar calefaccíon a un tren de viajeros.